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sábado, 22 de agosto de 2009

29 Julio 2009 - LEY DE MATERNIDAD EN LA COMUNIDAD DE VALENCIA







A finales del mes pasado el periódico ABC publicó un artículo sobre una Ley de Maternidad en la Comunidad valenciana, para evitar abortos y atender a jóvenes embarazadas. Bienvenida sea. Cuando otros países de nuestro entorno se están planteando cómo aumentar el número de nacimientos y frenar el aborto (y no sólo por un sentido ético, sino utilitarista), en España seguimos cuesta bajo y sin frenos hacia el aborto libre y gratuito, y a destrozar a la familia, hurtándole ayudas económicas y no respetando el derecho a elegir la educación de sus hijos. Sin mencionar, para no marear a los lectores, con la invención de nuevas formas de familia, cada cual más disparatada.

La Conferencia Episcopal Española ha declarado recientemente, no sólo que la ley que pretende sacar el Gobierno socialista sobre el aborto es inmoral y que todo parlamentario, si es de verdad un católico consecuente no debe votarla; no sólo ha declarado eso, repito, sino que también ha manifestado que no se puede votar a un partido que defienda el aborto, si quiere ser un católico consecuente. Más claro, agua.

Uno se podría preguntar cómo es posible tanta aparente insensibilidad de la masa social ante la realidad del aborto: miles de muertos en España. Más vale pensar que es por desconocimiento de lo que es un aborto, o por un mal acostumbramiento… Porque el hecho cierto y real, fotografiado y escaneado, es que lo que hay en el vientre materno en las primeras semanas es una criatura con formas humanas incluso, como puede apreciarse en la fotografía de 14 semanas, incluída en el cuerpo del artículo.

Al Gobierno central no le ha gustado nada esta iniciativa, y pretende cargársela. Y es que es muy difícil alimentarse sólo de ideologías.






Garantizar el derecho a la «vida en formación» desde la concepción y fomentar la natalidad para asegurar el relevo generacional. Esos son los dos ejes fundamentales del programa +Vida recogidos en la ley de maternidad impulsada por la Generalitat Valenciana. La norma, pionera en España, viene a echar más leña al fuego al debate surgido tras la aprobación, por parte del Gobierno central, del proyecto de reforma de la ley del aborto, que prevé la interrupción libre del embarazo hasta las catorce semanas de gestación.

Mientras para el Gobierno regional lo «progresista» es defender la vida del nonato desde el momento de la concepción, para el Ejecutivo socialista y su ministra de Igualdad, Bibiana Aído, la clave de la norma estatal es el «equilibrio» entre la autonomía de las mujeres y la protección de la vida prenatal.

Del mismo modo que hiciera con el compromiso voluntario de integración para inmigrantes, el gobierno presidido por Francisco Camps sigue la estela marcada por países europeos como Finlandia o Alemania, que ya se han puesto manos a la obra para «estimular la natalidad».

De hecho, aunque la Generalitat es consciente de que las políticas demográficas surten efecto a largo plazo, los resultados positivos que se han derivado de la aplicación de las medidas de estímulo de la natalidad en ambos países hacen prever al Consell que serán unas 100.000 mujeres al año las que se potencialmente se beneficiarán de la nueva ley de maternidad. Dicho de otro modo: las medidas de protección a la madre que ofrece la nueva ley valenciana podrían evitar miles de interrupciones voluntarias del embarazo en su primer año de aplicación. En concreto, se prevé que los primeros resultados significativos se obtengan en un plazo de cuatro años.

Duplicar los nacimientos

Las cifras que maneja el Ejecutivo autonómico indican que, para llegar a mantener el relevo generacional, debería haber 81.000 nacimientos más al año en la región. Esto es, para frenar el progresivo envejecimiento de la población, el índice de nacimientos por familia debería pasar del 1,05% actual a un 2,1%, justo el doble.

En los últimos años, la llegada de más de 100.000 jóvenes inmigrantes ha logrado suavizar esa tendencia, pero no ha sido suficiente para invertirla. Tampoco lo ha sido el elevado porcentaje de madres extranjeras en la Comunidad, pues uno de cada cuatro nacimientos que se produjeron el pasado año fueron en el seno de familias extranjeras.

Ley trasversal

Hasta tal punto se ha propuesto la Generalitat invertir la tendencia demográfica que la defensa de la «vida en formación» y la protección a las madres impregnará a la actuación de todos los departamentos del Gobierno autonómico, que desarrollarán por vía reglamentaria la normativa en un plazo de nueve meses.

El «quid» de la cuestión será la consideración del feto. Mientras la ley de plazos impulsada por el Gobierno se basa en la ausencia de evidencias científicas para considerar humano a un feto de menos de catorce semanas, la ley de maternidad valenciana reconoce derechos al no nacido desde la fase embrionaria.

De ese modo, al embrión se le considera «un miembro más de la familia», lo que otorga ventajas fiscales, en la reserva de plazas escolares o en el acceso a viviendas protegidas, entre otras. También habrá ayudas para las embarazadas en riesgo de exclusión.

Ponente del Congreso Mundial invita a las “Personas Monógamas” a recuperar la cultura




By Austin Ruse


(WASHINGTON, DC - C-FAM) Patrick Fagan, experto en familia y parte del Consejo de Investigación de la Familia, dijo en el Congreso Mundial de las Familias, celebrado la semana pasada en Ámsterdam, que existen dos culturas de la moral sexual y que ambas tienen un efecto profundo en la cultura y en la política pública. Fagan denominó a una cultura "monógama" y a la otra "polimorfa", y advirtió que una esta "robando" los hijos de la otra.

Fagan dijo a la audiencia que "la cultura de la familia tradicional se encuentra ahora en competencia intensa con una cultura muy diferente. La principal diferencia entre los dos es el ideal sexual abrazado por cada una". Describió una" elegancia en la sencillez de los ideales detrás de las dos culturas: la monogamia y la polimorfa poligamia en serie, o poliamor para abreviar. "

Fagan dijo que el "Estado constitucional fue el producto de la cultura monógama [mientras que] la expansión del Estado de bienestar social es cada vez más el producto de la cultura poliamor. El Estado constitucional se basa en un sentido de lo sagrado y da a la religión un lugar público así como protege la libertad de religión [o no religión] de todos ... El Estado de bienestar social de hoy está mucho más cómodo con el ateísmo o, al menos, con la supresión de la religión del discurso público y la privatización total de la religión y lo sagrado. "

En los temas relativos a la vida, Fagan dijo que en la cultura monógama "toda vida humana es sagrada y protegida, antes de nacer, así como los discapacitados o las personas de edad avanzada", mientras que en la cultura del poliamor alrededor de un tercio de los no nacidos son asesinados por sus madres y los discapacitados y los ancianos no son bienvenidos y cada vez son mas vulnerables a ser eliminados tempranamente ".

Fagan advirtió que mientras la cultura monógama es fecunda y se extiende, la cultura del poliamor se encuentra por debajo del nivel de fecundidad de reemplazo, la cultura poliamor se continua expandiendo a través del control que ejerce sobre tres áreas de la política pública: "la educación de los niños, la educación sexual y la salud de los adolescentes". Fagan dijo que a través de ese control, la cultura poliamor "arrebata a los niños de sus padres y de la cultura monógama en maneras análogas a las que los turcos otomanos del siglo XIV criaron niños de naciones cristianas para formar una élite de sus propios guerreros, los jenízaros".

Fagan dijo que "este robo está cerca de completarse cuando estas tres áreas del programa dan como resultado en los adolescentes la aceptación y comienzo de la práctica del acto sexual" y que "cada vez que los programas y medios de comunicación del poliamor tiene éxito en atraer adolescentes a la actividad sexual han capturado otro jenízaro".

Fagan describió los esfuerzos que la cultura monógama ha utilizado para defenderse, sobre todo el aumento y éxito de la educación en la abstinencia, pero también explicó la manera en que la cultura del poliamor los ha aplastado. También señaló que las campañas contra la educación en el hogar ,“homeschooling”, son un esfuerzo por parte de la dominante cultura del poliamor para evitar que los padres protejan a sus hijos.

Para terminar, Fagan exhortó a "las personas monógamas" a defenderse. Dijo que la única respuesta es que luchen por el control "sobre lo que es suyo y de su familia, aquello que financian sus impuestos, y lo que puede utilizar en la crianza de sus hijos, el control de los tres grandes programas de educación de la niñez, la educación sexual y programas de salud de los adolescentes ".

Traducido por Aracely Ornelas

domingo, 9 de agosto de 2009

¿Soportarlo todo? Error de una madre

Alfonso Aguiló

"Es una cosa que ha ido empeorando en casa de día en día desde hace ya tiempo –se lamentaba con amargura una chica de diecisiete años.

"Antes, mi madre tenía más autoridad, pero ahora está como arrinconada y apenas le obedece nadie en nada de lo que dice.

"La casa se ha convertido en una especie de pensión donde la gente sólo aparece para comer, dormir y pedir dinero. Cada uno vive a su aire, es frecuente que lleguemos tarde a casa sin avisar, y es raro el día que no discutimos.

Así están las cosas

"Mis dos hermanos pequeños han perdido el respeto a mi madre. Le llevan siempre la contraria, y alguna vez, en medio de esos enfados, han llegado a insultarla. Me duele ver cómo la tratan, pero no me atrevo a decirles nada, porque la verdad es que tengo que reconocer que yo a veces también he actuado bastante mal y no estoy en condiciones de echarles en cara nada.

"Mi padre está siempre fuera, desde que cambió de trabajo, y cuando llega a casa no está para nada. Además, como tiene un genio fatal, mi madre prefiere no decirle nada de los disgustos que le damos, y hace bien, porque creo que sería casi peor.

"Ella sufre mucho y soporta todo con una paciencia y una humildad admirables."

— Pues creo que es un error consentir esas actitudes a los hijos.

Lo que no es virtud

Por supuesto, pero estando ya consolidadas, no es nada fácil reconducirlas. Tendría que servir este ejemplo como experiencia para plantear bien las cosas desde el principio, porque la actitud de esa madre ni es paciencia ni es humildad, como pensaba su hija. No puede ser virtud dejarse avasallar de esa manera. En la familia, como en todos sitios, hay que empezar por exigir que a uno le traten con respeto, y eso no es orgullo ni vanidad.

Hay veces en que a una persona le toca sufrir un drama familiar muy doloroso, y a lo mejor casi lo único que puede hacer es soportarlo todo pacientemente. Pero lo normal es que todos tengamos que dejar las cosas claras todas las veces que haga falta hasta conseguir que se nos respete.

Quien insulta, sobre todo si es con frecuencia, se descalifica a sí mismo. Y quien lo soporta habitualmente con gesto de víctima puede ser admirable o heroico, pero a veces resulta que es, más bien, simplemente un poco tonto o un poco tonta.

Hay que poner la energía precisa para defender los propios derechos, y esto es compatible con la humildad.

Habrá que buscar una solución concreta a cada caso, pero raramente la postura ideal será soportarlo todo y callarse eternamente.

¿Qué le pasa a la ONU?

   Por    Stefano Gennarini, J.D       La ONU pierde credibilidad con cada informe que publica. Esta vez, la oficina de derechos humanos de ...